No hay palabras para describir este postre, sólo onomatopeyas... porque está sencillamente ESPECTACULAR.
Se trata de un postre inglés llamado sticky toffee pudding, un bizcocho esponjoso y pegajoso por el dulce de leche y los dátiles, que se come en caliente acompañado de una gran bola de helado de vainilla que le aporta contraste y suavidad.
Le dedico este post a mi buen amigo Julián que ha sido chef en Edimburgo y es a él al que le debo esta magnífica receta, pero eso sí, a la que he hecho un par de modificaciones.
¿Quieres saber más, a que sí?
Ingredientes
Para el bizcocho
225 gramos de dátiles sin hueso
175 mililitros de agua
175 gramos de harina
2 huevos
85 gramos de mantequilla
100 gramos de azúcar moreno
Un sobre de levadura en polvo
Una cucharadita de bicarbonato sódico para repostería
Para el dulce de leche
90 gramos de azúcar moreno
25 gramos de mantequilla
200 mililitros de nata líquida para cocinar
Helado de vainilla para acompañar
Preparación
Paso 1: En primer lugar ponemos en una cazuela pequeña los 175 mililitros de agua con el bicarbonato de sodio y los dátiles. Los hervimos a fuego medio-alto removiendo de vez en cuando, durante unos 12 minutos. De esta forma se ablandará la piel de los dátiles.
Paso 2: Mientras se cuecen los dátiles calentamos en un recipiente la mantequilla durante unos segundos en el microondas.
Paso 3: En un bol o ensaladera grande añadimos el azúcar y la mantequilla derretida y lo mezclamos bien con la ayuda de unas varillas. En este momento encendemos el horno a 170 grados.
Paso 4: A continuación añadimos al bol anterior un huevo, aproximadamente la mitad de la harina tamizada y la levadura y mezclamos de nuevo con las varillas.
Paso 5: Seguidamente añadimos el segundo huevo, la otra mitad de la harina tamizada y mezclamos de nuevo. De esta forma nos quedará una mezcla más homogénea.
Paso 6: Cuando ya se han cocido los dátiles les escurrimos el agua de cocción, los troceamos y los añadimos a la mezcla del bol anterior.
Paso 7: Preparamos un molde con papel de horno y añadimos la mezcla del bizcocho, extendiéndola uniformemente con la ayuda de una espátula o cuchara. Cubrimos con papel de aluminio y horneamos el bizcocho durante unos 30 minutos.
Paso 8: Mientras se hornea el bizcocho vamos haciendo el toffee. Par ello ponemos en una cazuela o sartén el azúcar a fuego medio-bajo y removemos sin parar para que no se queme, hasta que se haya fundido.
Paso 9: Seguidamente añadimos la mantequilla y la mezclamos junto con el azúcar con una cuchara durante un minuto. Inmediatamente añadimos la nata líquida y la cocinamos durante unos 4-5 minutos hasta que adquiera un color marrón-marrón oscuro y una textura espesa. Apagamos el fuego y reservamos.
Paso 10: Pasados 25-30 minutos del horneado del bizcocho hacemos la prueba del palillo para ver si está horneado. Para ello clavamos un palillo en el medio del mismo, si sale limpio ya está. Si por el contrario sale húmedo lo dejamos unos minutos más y volvemos a hacer la prueba hasta que el palillo salga limpio.
Presentación
Sirve un cuadradito de bizcocho en caliente con dulce de leche caliente por encima y acompáñalo con una gran bola de helado de vainilla por encima.
Consejos
- La salsa de toffee en la receta original lleva el doble de azúcar , el doble de mantequilla y 225 mililitros de nata en lugar de 200. Yo la he modificado porque prefería que quedara más ligera y espesa, y créeme queda suficientemente dulce, pero la puedes hacer más potente, pruébalo y ¡endúlzalo a tu elección!
- Si te sobra cubre el dulce de leche en un vaso y el bizcocho con papel film y refrígeralos, lo podrás disfrutar durante varios días. A la hora de comerlo corta la porción que te quieras comer, cúbrela con dulce de leche, caliéntalo durante unos 40 segundos al microondas, añade el helado y ¡a disfrutar!
¡Que aproveche!
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