La pasta fresca casera tiene una infinidad de posibilidades. Con tan sólo 4 ingredientes habituales en todas las cocinas, puedes preparar un plato que junto con una buena salsa y/o un buen relleno, puede pasar a convertirse en el plato preferido de toda la familia. Además con la satisfacción de haberla preparado totalmente casera.
En esta ocasión he preparado unos raviolis triangulares rellenos de calabaza, queso gorgonzola y cebolla caramelizada, y una salsa que le va estupenda: salsa de 4 quesos con toque de pimienta.
¿A que te apetece saber más?
Ingredientes para 4 personas
Para la pasta
400 gramos de harina
4 huevos
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Sal
Para el relleno
100 gramos de calabaza
100 gramos de queso gorgonzola
Una cebolla mediana
Una cucharadita de azúcar
Una cucharada de crema de vinagre balsámico
Para la salsa
75 gramos de queso emmental
75 gramos de queso havarti
75 gramos de queso de cabra
75 gramos de queso mozzarella
100 mililitros de leche desnatada
4 cucharadas de queso en polvo
Pimienta
Sal
Preparación
Paso 1: En primer lugar preparamos la masa para la pasta. Para ello nos pondremos a prepararla en una encimera o mesa medianamente amplia para que la podamos trabajar con comodidad.
Tamizaremos la harina sobre la mesa o encimera (previamente limpia y seca) con la ayuda de un tamizador o colador, de forma que quede como un volcán de harina. Se pondrán unos 100 gramos de harina por persona.
Paso 2: Encima de la montaña de harina quedará como un hueco y es ahí donde añadiremos los huevos (sin batir), se añade un huevo por cada 100 gramos de harina, el aceite y un poco de sal. Seguidamente vamos mezclando la harina del volcán de fuera hacia arriba (hacia los huevos y aceite), cuando ya esté todo mezclado, la vamos amasando bien, de forma que quede una masa homogénea, sin grumos, y de textura uniforme, durante unos 8 minutos.
Paso 3: Por último hacemos una pelota con la masa homogénea resultante y la envolvemos en papel film. Refrigeramos la pelota durante una hora.
Paso 4: Mientras reposa la masa de pasta, vamos a hacer el relleno. Para ello cortamos la calabaza (mucho cuidado al quitarle la piel) y el queso gorgonzola en dados y la cebolla la picamos finamente.
Por un lado ponemos a cocer la calabaza durante 15 minutos. Mientras se cuece la calabaza sofreímos la cebolla en dos cucharadas de aceite de oliva a fuego medio durante 10 minutos. Transcurrido ese tiempo le añadimos el azúcar y la crema de vinagre balsámico y la cocinamos durante 4 minutos más. Reservamos.
Paso 5: Una vez cocida la calabaza, escurrimos el agua de cocción y la trituramos o chafamos con un tenedor. Añadimos la cebolla caramelizada y mezclamos bien.
Paso 6: Por último añadimos el queso gorgonzola y lo trituramos todo junto. Reservamos.
Paso 7: Pasada la hora de refrigeración de la pasta ya podemos preparar nuestros raviolis. Para ello cortamos un cuarto aproximadamente de la bola, y el resto de la bola la cubrimos con un paño húmedo para evitar que se seque. Ese cuarto de bola lo amasamos durante un minuto y lo vamos extendiendo con un rodillo. En cada uno de los procesos siguientes vamos añadiendo harina, para manejar mejor, cada lámina de pasta.
A continuación cogemos nuestra máquina de hacer pasta y la anclamos a la mesa(pulsa AQUÍ para ver la que tengo yo).
El rodillo de la máquina de hacer pasta lo ponemos en posición del mayor grosor, y vamos pasando nuestra masa, la doblamos por la mitad, y la volvemos a pasar por el rodillo. Repetimos este proceso cada vez con un número de grosor más bajo, hasta llegar al número 3 o número fino-medio.
Como esa lámina de masa se nos habrá hecho cada vez más fina, la podremos cortar por la mitad, obteniendo dos láminas de pasta fresca. Esas 2 láminas de pasta fresca las cubrimos con otro paño húmedo.
Repetimos todo el proceso resultante para los tres cuartos de pelota de pasta fresca resultante, resultando finalmente 8 láminas de pasta fresca en total. Cogemos cada lámina y la recortamos de forma que sea un poco más grande que nuestro molde para pasta.
Paso 8: Ya podemos dar forma a nuestros raviolis. Para ello ponemos una lámina de pasta fresca encima del molde de forma holgada, para que en cada hueco la lámina haga un poco de hoyo, y así quepa más relleno.
Paso 9: Seguidamente añadimos un poco de relleno en cada hoyo, con la ayuda de una cucharita. No os paséis de echar relleno, sólo el justo, ya que sino en el paso siguiente las láminas no sellarán bien y se saldrá parte del relleno.
Paso 10: Cuando ya tenemos todos los hoyitos rellenos ponemos otra lámina de pasta fresca encima, asegurándonos que cubre todo el molde, y pasamos un rodillo por encima para que queden selladas las láminas.
Paso 11: Desmoldamos los raviolis con cuidado y los pintamos con un poco de huevo batido para sellarlos del todo. Los cubrimos con el paño húmedo de nuevo.
Paso 12: A continuación preparamos la salsa para la pasta. Para ello ponemos en un cazo o sartén todos los quesos rallados o troceados a fuego medio. Cuando empiecen a fundirse añadimos la leche en caliente, sal y pimienta. Removemos bien y cocinamos durante unos 7 minutos o hasta que la salsa tenga la textura deseada.
Mientras se cocina la salsa, cuando le queden unos 4 minutos para estar lista, ponemos a calentar agua, para cocer los raviolis. Cuando el agua esté bien caliente, a punto de hervir, pero sin llegar a hacerlo añadimos los raviolis, y los cocinamos durante 1-2 minutos, en agua caliente sin hervir. Los pescamos con una rasera, en lugar de escurridor y los servimos en los platos directamente.
Presentación
Riega generosamente con salsa de 4 quesos y espolvorea un poco de queso en polvo y pimienta recién molida.
Consejos
- La cantidad de relleno varía, dependiendo del molde utilizado, si te ha sobrado no te preocupes, puedes hacer unas deliciosas croquetas de calabaza, queso gorgonzola y cebolla caramelizada. Obtén la receta pulsando AQUÍ.
- Es muy importante que la masa de pasta fresca o las láminas estén cubiertas todo el tiempo con un paño humedo, para evitar que se sequen, agrieten y finalmente se rompan.
- Los quesos elegidos para la salsa pueden ser los que más te gusten, yo he querido elegir unos quesos que fueran suaves y no enmascararan el sabor del relleno, pero como siempre, ¡Puedes modificar la receta a tu gusto!
Espero que te haya gustado la receta tan deliciosa que te he traido hoy, y siempre que tengas un buen rato libre para cocinar, (porque seamos honestos, lleva un rato majo prepararla) te animes a hacerla. Si tienes alguna pregunta o quieres decirme hola, ¡Déjame un comentario!
¡Que aproveche!
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