¿Cansad@ de comer el pescado siempre a la plancha o a la romana? Hoy te traigo una receta de pescado en salsa, muy ligera y que se prepara en un periquete. Se trata de salmón con salsa de mejillones y piquillo.
Prepárate para mojar pan...
Ingredientes para 4 personas
8 filetes medianos de salmón fresco
4 dientes de ajo
6 pimientos del piquillo
Dos latas de unos 100 gramos de mejillones al natural
Una cucharada de pimentón dulce
Una cayena (opcional)
100 mililitros de vino blanco seco aromático
Caldo de pescado (unos 300 mililitros)
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta
Sal
Preparación
Paso 1: En primer lugar cortamos los ajos a láminas y la cayena (opcional) y reservamos. Ponemos a calentar en una cazuela de diámetro mediano dos cucharadas de aceite de oliva a fuego medio. Añadimos los ajos y la cayena y los cocinamos durante dos minutos. Seguidamente añadimos los pimientos troceados y los cocinamos durante un par de minutos más.
Paso 2: A continuación añadimos el pimentón removiendo sin parar durante unos segundos para evitar que se queme. Adicionamos el vino y dejamos que se reduzca a la mitad, a fuego fuerte para que se evapore el alcohol.
Posteriormente añadimos los mejillones (reservando unos 4 para decorar al final), el 'líquido' de la lata y unos 200 mililitros del caldo de pescado. A fuego medio dejamos que se reduzca durante 5 minutos. Seguidamente, trituramos la salsa y vamos añadiendo más caldo de poco en poco hasta que adquiera la textura que deseemos. Probamos y rectificamos de sal.
Paso 3: Por último salpimentamos los filetes de salmón y los cocinamos durante un par de minutos por ambos lados a fuego medio.
Presentación
Sirve dos filetes de salmón por persona, riega bien con la salsa y añade un mejillón como decoración.
Consejos
- Si te sobra mucha salsa o no le quieres echar demasiado al pescado, resérvala. Si le añades un poco de nata o leche y la pasas por un colador, tendrás una crema riquísima de mejillones como entrante para el día siguiente.
- No añadas sal hasta el final, ya que todos los ingredientes aportan mucho sabor y puede que no necesites añadir ni pizca.
¡Que aproveche!
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